Asilo de Benalúa, Alicante
23 de abril de 2016
- 10:45 horas.
Cielo loco entre sol y nubes. La Primavera llegó.
Juan Carlos y yo llegamos a nuestro primer punto de encuentro con la furgo puesta. Allí nos esperan Laura y Jonathan, dos compas de Continentes sin Contenido y de tantas otras cosas. Como veganxs que son, van cargadxs hasta el lomo, pues han preparado comida rica libre de tortura para compartir con las y los vecinos de Benalúa y mostrarnos (supongo) "haciendo camino al andar", que otra forma de alimentarse y vivir más respetuosa es posible. Así que ya, lxs cuatro, nos dirigimos a la segunda y última parada: Nuestro querido e infrautilizado Asilo de Benalúa.
- 11:30 horas.
Somos muchxs. Estrenamos nuestras bonitas camisetas de Continentes sin Contenido diseñadas por Amaya (nuestra curranta, artista, blogera continentera) y hechas materia por The October Press (amigxs e importantes agentes de ocio y cultura no egemónica de nuestra ciudad)
No dejan de llegar personas bonitas que lo tienen claro: El asilo debe volver a ser para la ciudadanía. Mayores, pequeñxs, medianxs, gente con mucho arte, gente con mucho saber, gente fuerte, solidaria, activa... Todxs van llegando.
Isabel, compañera de la Asociación de Vecinas y Vecinos del Templete de Benalúa, estrena el evento y a continuación un compañero de Alicante Vivo nos hace una ruta preciosa por diferentes puntos del barrio, mientras Resonante, su arte y artistas, nos amenizan con su percumusicalidad. Nuestro estupendo guía memoriado, nos cuenta nuestra historia. Él, nos recuerda lo hermosa que era esta ciudad, lo mal tratada que ha sido, lo que hemos perdido y lo que por suerte, aún nos queda, aunque pendiendo de un hilito y que debemos proteger. Al fresco de nuestro ficus benaluense aplaudimos y a mi se me eriza la piel. Se me eriza porque estamos aplaudiendo a un árbol; se me eriza porque aplaudimos a esas personas que lucharon porque no nos lo robaran y lo lograron. Se me eriza la piel porque en ese instante me siento en el mundo al revés, que debería ser el mundo al derecho, pero no lo es. Me siento bien, me siento en un hueco del mundo, en un momento concreto, que me hace respirar, tener esperanza y creer en nosotrxs como especie: Aplaudimos a un árbol, aplaudimos a la vida y no a la muerte, no a la destrucción, que es a lo que aplaudimos sin enterarnos con nuestro andar por la vida habitual. Gracias.
Casi se me olvida, durante esta ruta por el barrio, las artistazas mañosas y culturetas de Alicante Knits, van dejando a nuestro paso libros libres recogidos en preciosos saquitos, tejidos a mano, para celebrar el día del libro y enculturizar embelleciendo, un poquito más, nuestra ciudad.
- 13 horas.
Isabel (de la A.VV.) lee el manifiesto con el que da voz, en nombre de las presentes a nuestro deseo. Queremos recuperar nuestro asilo y llenarlo del contenido y de la vida que tenemos, de sobra. Miguel Ángel Pavón (Concejal de Urbanismo, Imagen Urbana, Vías públicas y Conservación de inmuebles) hace acto de presencia y se une al abrazo ciudadano a este emblemático continente benaluense. Espero que su presencia sea una buena noticia, confío en que si. Espero que entienda qué es lo que a él y a su equipo les toca conseguir en este asunto del asilo y que lo hagan. Espero y deseo que con firmeza y seguridad vayan a por ello y devuelvan a la ciudad y al barrio lo que es legítimamente suyo y por lo que ademas lleva años luchando. El espacio es nuestro, la gestión es nuestra, de la ciudadanía. De ellos, de nuestrxs representantes políticxs es la responsabilidad de acompañar y facilitar los procesos que su ciudad vive, quiere y necesita.
- 13:30 horas.
Empieza el baile a cargo de Lindy hop Alicante. A la sombra de los árboles bailamos, bueno, algunxs al menos lo intentamos, porque lo que es bailar, bailar... Muchas risas y pisotones, con este divertido y subversivo baile, el swing, que nació en un periodo entre guerras, como mecanismo resiliente, que conectaba a la gente con la esperanza, la capacidad de gozo y de juego en momentos durísimos. Así que nos dejamos empapar con su ritmazo y con lo que este trae, para continuar en nuestra festiva jornada reivindicativa.
- 14 horas.
Comida popular de sobaquillo. Puf... No faltó de nada... Comida y bebida por un tubo, qué rico todo. Y es que esto de lo culinario también es un arte y parece que entre lxs asistentxs había unxs cuantxs artistas... Yo reconozco que la cocina no es lo mío, con lo que mi aportación vino de las mañosas manos de las panaderas del comercio de enfrente... Jeje.
- 15 horas.
Y con la panza y el alma llenas de tanta cosa positiva en pocas horas, se lanzó Manu, de la Red de Huertos de Alicante, a contarnos de forma difícilmente
Y de esto al gozo solo hubo un paso, porque tras la charlita de Manu, se lanzó guitarra en mano a cantarnos "las cuarenta" el cantautor Alfonso Cope, que nos levantó a bailar y nos hizo la función de café, porque a partir de ese momento fue un no parar entre talleres locos y divertidos de Malabares de Donyet Ardit, la pintada de caras de Nuria, la "Batalla de ilustrdorxs ididotas" de María Maraña y Misa Shine, la teje lupa continentera de Alicante Knits y el brutal taller final de música africana de Resonante y Lázaro (musicasdelmundo). Y la tarde pasó, mientras las perras gozaban persiguiendo a un limón, niñxs, jóvenes y mayores disfrutando el encuentro y la creatividad. Al fin y al cabo, este fue un día de empoderamiento ciudadano, importante como poco, en el que demostramos que Tenemos Continentes y que Tenemos Contenidos para ellos. En este caso, para el Asilo.
Alicante es nuestra ciudad, con todo el gusto y la responsabilidad que esto implica.
Un placer de los grandes esta jornada. Seguimos compañerxs.
¡ASI-LO QUEREMOS!
Edurne Baeza.